Sumergido en mi pensamiento intento ver qué es eso, el amor. Comienzo a recorrer senderos, los cuales no alcanzo a comprender. Estando inmerso ahí, en la oscuridad observo siluetas que son alumbradas por un destello esporádico que sólo puedo sentir. Reconozco las formas que busco aunque no las vea; morder, rasguñar, gritar… Eso no es amor. Sentimiento que va más allá de la pasión. Es estar vulnerable entre el arco y la lira; Ráfaga que hiere de lejos, música que fascina. ¡Oh, Apolo! Es estar dirigido; ¡oh, Dionisio! Es salir de mí: contigo hacia la locura; sin ti, hacia la muerte.