Baños de sal

No hizo falta que tomara un baño al día siguiente, pues bastó con el que le habían procurado sus lágrimas la noche anterior…

Hiro postal

Deja un comentario

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s