Adivina, adivinador

¿Quién soy, quién soy?

Que todos me temen y se cubren,

ante mí el más fuerte tiembla

y el más débil sucumbe.

 

Traigo más calidez que ninguno

y estoy lleno de contradicción:

dejo sordos a los músicos,

y sin habla al orador.

 

Hago llorar a los fuertes

y conmigo los valientes tiemblan.

No en vano me evitan los prudentes,

porque cuando aparezco los encierran.

 

 

Deja un comentario

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s