Gracias a lo insoportable que se pone mi perra ciertos días del año (a saber cada seis meses), he llegado a entender la magnitud de lo que le ocurre a las mujeres cada mes: un terrible monstruo se apodera de ellas. Hay que entenderlas, no se su culpa, es la naturaleza de lo femenino que toca lo más profundo y terrible de los avernos.
Gazmogno