De ruidos y canciones

Hace casi dos semanas, en el festival Vive Latino, un cantante extranjero nos recordó las lastimeras condiciones de nuestro país, enfatizando el caso de los 43 normalistas. Otras voces, al parecer más estruendosas, cantaron y recordaron el mismo suceso durante dicho festival. Como las protestas no fueron manifestadas en lengua universal, lo que haría que todo el mundo recordara el caso de los 43, el gobierno mexicano no se preocupó en responderles, además el Vive Latino 2015 fue una tendencia esporádica, rápidamente se apagó. La música divierte más de lo que incita a pensar.

De entre lo que se dijo recordando aquel penoso caso, durante los conciertos del festival, la frase “terrorismo de estado” me resultó sumamente inquietante. Lo que me hizo pensar: ¿padecemos constantemente el terrorismo de estado? No nos explotan bombas, así que la frase suena más a estrofa o título de canción política que a la realidad del país; quizá lo dijo por ser extranjero. Aunque tampoco podemos decir que vivimos en una armonía política. Parece, más bien, que escuchamos cohetes (pequeños y grandes) por doquier (aunque hay colonias con más pólvora) y a veces incluso nos lastiman; algunos cohetes pueden lastimarnos tan sólo al escucharlos (como las frases explosivas) o cuando nos caen en la piel (como cuando somos víctimas de la delincuencia organizada), y también pueden advertirnos un futuro desolador (como las mejores canciones). Al pensar la frase “terrorismo de estado” como concepto nos damos cuenta de su contradicción, pues una de las principales funciones del estado es proteger a sus ciudadanos, mientras que el terrorismo, por alguna oscura razón, tiene como finalidad perturbar la paz de aquéllos. ¿El cantante que dijo la ominosa frase estaba consciente de cómo la entenderían quienes la escucharan? ¿Nos lastimó o nos advirtió?

Los artistas al reformar nuestra experiencia deben pensar qué efecto tendrán sus creaciones, pues, por ejemplo, con los asistentes del Vive Latino 2015 se pudo iniciar un suceso sumamente violento. Si los artistas pueden ayudarnos a vivir mejor, que se preocupen en hacerlo bien; ante todo deben pensar en cómo hacen pensar.

Yaddir