Quise pescar en las nubes con una caña muy larga que tuviera un mayate como cebo.
Quise pescar dos peces tan grises como el firmamento antes de que llovieran su color al suelo.
Quise pescar desde abajo, colar mi anzuelo en la pecera de Dios mientras Él no nos presta atención.
Quise pescar en el Cielo ahora que El Mar se secó.