Parcas letras

Parcas letras

 

 

En el afán de seguir el juego de las letras contadas, de que haya más participantes en el juego y acomodándome a las costumbres de los tiempos, presento hoy una calavera que es soneto, con sus letras contadas y bien muertas. Se llama “Las trescientas letras muertas”.

Buscándolo por astuto,                    19

la Parca encontró al Javel:              22

“por emular al gran Gabriel           22

serás motivo de luto”.                      28

Luego fue por su compinche,            22

un tal Tacitus llamado:                       19

“te aniquilaré ahogado,                      19

dejaré que el cuerpo se hinche”.       25

“Ando buscando al Namaste              21

por no respetar las letras,                  22

sin que con ranas se baste”.               21

“¿Por qué hacer cruentas cuentas      26

en un soneto que engaste                     20

trescientas letras muertas?”                 24

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Námaste Heptákis

 

 

Escenas del terruño. 1. Pues no, los funcionarios no cumplieron: en octubre no se presentaron avances en la investigación de la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa. 2. Mintió. Violó la legislación. Fue desmentido. Se le destituyó. Se dijo víctima. Los progres lo arroparon. Se desdijo. Culpó al medio al que filtró la información. Los progres culparon a los funcionarios por tomar en serio al medio en que el exfiscal filtró la información. Y al final el señor Santiago Nieto declinó ser restituido. Farsa de inicio a fin. 3. El senador Miguel Barbosa, que así como dice una cosa dice otra porque hay cosas que ni qué, selló el caso del señor Santiago Nieto con la siguiente ocurrencia: “yo no conozco las causas, se van a conocer, no quisiera especular, pero sin duda tiene que ver con amenazas”. Ah, pus sí. 4. Buena pieza documental del equipo de Carlos Loret de Mola: Raqqa, vivir en el Estado Islámico. 5. Y terribles las imágenes que presentó el equipo de Ciro Gómez Leyva sobre los abusos carceleros. 6. Deshecha en elogios revolucionarios, La Jornada del pasado 24 de octubre elogió en nota principal y en la columna de Enrique Galván Ochoa una «propuestita» de Carlos Slim. No vieron, ¿raro?, la semejanza de la «propuestita» con el salario rosa que prometió Alfredo III. Excedidos en sus elogios al millonario no lograron ver que el «salario Slim» es una pobre imitación de la idea zaidiana de «repartir en efectivo». Hace 40 años Zaid lo propuso pensando en la justicia social y el combate a la corrupción; en la semana, Slim lo propuso porque «será mucho más barato». Ah, qué críticos que no pueden criticar a algunos. ¿Por qué será?

Coletilla. Si alguien ve a las nubes más contentas, no se extrañe: Fats Domino ya está en el cielo. Murió el pasado 24 de octubre, tras volver a la vida en 2005. En aquel año, retirado de la música y resguardado en su hogar, Antoine Dominique Domino lo perdió todo: sus recuerdos, sus trescientos zapatos, su tranquilidad. Fue encontrado entre los escombros de su casa como uno más de los damnificados por el huracán Katrina. Dicen que murió sonriendo… como lo recordaremos. Dicen también que por estos días las nubes andan tan risueñas como él.