Certero abrazo

Certero abrazo

 

un alfiler atrás del corazón

Adolfo Castañón

Anudados los ojos, nublada la garganta, la memoria acecha a punto de llorar. Cavilación y duda. Conoce uno al amigo, sabe cómo lo está pasando. Certeza en lo que se tiene que decir; incertidumbre de la posibilidad de decirlo. No, nuestra amistad, nuestro compartido amor por la palabra, no está renunciando a decir, a decirnos. Certeza en que lo dicho antes puede ser vivido ahora; incertidumbre de que la vida ―no tú ni yo, la vida― nos alcance para decirlo todo. No claudica la fe, en ella nos encontramos: el rezo de la noche amaina la distancia. No claudica el afecto, el cariño que hace desear que el amigo sea reconfortado: el aliento es un pálpito suspenso, la preocupación hormiguea en los brazos, tu ausencia es la esperanza del abrazo. Claridad: mi ilusión a veces aspira a proteger la vida. Incertidumbre: ¿seré suficiente para acompañarte? Certeza: sin esta cavilación y duda seríamos extraños. Acechamos nuestra fe, a veces desnublamos las palabras y vivimos la amistad con nuestras vidas anudadas.

 

Námaste Heptákis

 

Coletilla. A mi juicio, esta es una de las mejores interpretaciones de Montserrat Caballé, que descanse en paz.