Amalgama metafísica

“Aquel día comprenderán que yo estoy en mi Padre,
y que ustedes están en mí y yo en ustedes

Jn 14:20

 

Un pastel, la mayoría. Pero un buen pastel, pocos lo saben hacer. Así me dijeron un día, pero yo no lo creía. Según yo hacer postres era lo más fácil en la cocina. Era cosa de harina, huevos,  chocolate, mantequilla, naranja y un poco de vainilla. No, no está bueno –me dijeron- sabe a pura harina y mantequilla. Lo intenté de nuevo, ahora con menos harina,  más chocolate y la misma vainilla. Tampoco –dijeron después- ahora está todo batido, no sabe a nada específico. La verdad no entendía. Primero que no había unidad y luego que cada sabor no se distinguía. Después de mucho agregar y quitar,  batir e intentar, por fin lo logré. El pastel –decían- ahora sí te ha quedado bien. Era todo un misterio, aunque luego que me explicaron bien, sospeché que es el mismo misterio que está en todos lados, tiempos y vidas. Después de pensar y pensar, me parece que ahora entiendo aunque sea tantito más. El secreto es el balance: se trata de dar unidad, pero a la par, que cada ingrediente resalte por su sabor. Que sea uno y el mismo pastel aunque también que todo él huela a vainilla, sepa a chocolate, a naranja y un poco a mantequilla. No se trata de una disyunción excluyente. No es ni negro ni blanco, es algo así como el gris. No es sólo lo unidad, sino también multiplicidad. No es sólo multiplicidad, sino también unidad. Es semejanza y diferencia a la par. Quizá de algo parecido a esto se trate el mundo entero. Quizá nos falta pensar esto un poco más. Desde metafísica hasta la política. Tal vez (sólo tal vez) hoy a este país también le falta el balance y la conciliación de contrarios.  Tal vez falta unidad y rumbo determinado, tal vez el “todos” está olvidado, e igualmente el color particular o la individualidad.  Debe haber –como en el aquel pastel- cohesión sin olvidar el “cada quien”.

PARA APUNTARLE BIEN: “Eran tres los sexos de las personas, no dos, como ahora, masculino y femenino, sino que había, además, un tercero que participaba de estos dos, cuyo nombre sobrevive todavía, aunque él mismo ha desaparecido. El andrógino, en efecto, era entonces una cosa sola en cuanto a forma y nombre, que participaba de uno y de otro, de lo masculino y de lo femenino, pero que ahora no es sino un nombre que yace en la ignominia…Eran tres los sexos y de estas características, porque lo masculino no era originariamente descendiente del sol, lo femenino, de la tierra y lo que participaba de ambos, de la luna, pues también la luna participa de uno y de otro. Precisamente eran circulares ellos mismos y su marcha, por ser similares a sus progenitores. Eran también extraordinarios en fuerza y vigor y tenían un inmenso orgullo, hasta el punto de que conspiraron contra los dioses. Y lo que dice Homero de Esfialtes y de Oto se dice también de ellos: que intentaron subir hasta el cielo para atacar a los dioses. Entonces, Zeus y los demás deliberaban sobre qué debían hacer con ellos y no encontraban solución. Porque, ni podían matarlos y exterminar su linaje, fulminándolos con el rayo como a los gigantes, pues entonces se les habrían esfumado también los honores y sacrificios que recibían de parte de los hombres, ni podían permitirles tampoco seguir siendo insolentes. Tras pensarlo detenidamente dijo, al fin, Zeus: “Me parece que tengo el medio de cómo podrían seguir existiendo los hombres y, a la vez, cesar su desenfreno haciéndolos más débiles. Ahora mismo, dijo, los cortaré en dos mitades a cada uno y de esta forma serán a la vez más débiles…” Dicho esto cortaba a cada individuo en dos mitades, como los que cortan las serbas y las ponen en conserva o como los que cortan los huevos con crines…” Platón. El Banquete (189e-190e).

MISERERES: Continúa la controversia con la reforma laboral; se rumora que es sólo para proteger a sindicatos y a empresarios (la “democracia sindical” es uno de los puntos que trata la reforma; se habla de democracia por un lado, pero también se da total libertad de contrato o despido al patrón). Terminó la Caravana del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad. La columna de S. A. habla sobre esto: http://www.sergioaguayo.org/html/columnas/Sobrewashington_190912.html. Y hablando de de la unidad y la diferencia. Este es un artículo sobre la economía mexicana (y la desigualdad): http://globalpublicsquare.blogs.cnn.com/2012/09/12/misreading-mexico/