Nubes

 “And neither have they hearts to stay,

Nor wit enough to run away”

S. B.

 Esta historia es la de Ara. La de la personalidad rara. La que nunca sabía qué quería. Desde siempre fue muy alegre, o por lo menos su sonrisa eso nos quería contar. Por esa sonrisa y por su eterna curiosidad, su abuelo la prefería. También era bonita. Tal vez por eso era tan popular. Toda su vida fue muy indecisa. De niña tuvo como diez colores preferidos. Y ni se diga cuando le preguntaban a qué se quería dedicar.  Admiró a su padre, y como a mil personajes más. Todos de nacionalidades, religiones, vocaciones y amores muy diferentes. Inestable, misteriosa, magnética y silenciosa. Peregrinaba de allá para acá. Vivió en muchísimos países de casi todos los continentes. Había estudiado fotografía y letras inglesas. Quiso ser una gran escritora. Luego maestra. Luego pensó que el teatro era lo de ella. Nunca se casó. Creyó amar cinco veces, pero sólo una amó. A muchos les molestaba esa fragilidad de su voluntad. Corría y cambiaba. Era agua, hielo, nieve y nubes. Y agua una vez más.  Aunque, detrás de su indecisión se escondía algo más. Pocos son los suertudos que descubren su color, los que saben lo que aman y si aman o no. Los que saben para siempre quiénes son. Pocos son los que tienen el tiempo y no se cansan de preguntar (y más estos días agitados que tienen el tiempo contado). Ella buscaba, como todos quizá, algo que la dejara sin habla o con todas las palabras. Buscaba su gran pasión. La respuesta a la pregunta estrella;  buscaba saber quién era ella. La diferencia, su virtud y su condena, fue que ella nunca se cansó de buscar.

 PARA APUNTARLE BIEN: Esto se llama Portrait d’une Femme y es de Ezra Pound

Your mind and you are our Sargasso Sea,

London has swept about you this score years

And bright ships left you this or that in fee:

Ideas, old gossip, oddments of all things,

Strange spars of knowledge and dimmed wares of price.

Great minds have sought you–lacking someone else.

You have been second always. Tragical?

No. You preferred it to the usual thing:

One dull man, dulling and uxorious,

One average mind–with one thought less, each year.

Oh, you are patient, I have seen you sit

Hours, where something might have floated up.

And now you pay one. Yes, you richly pay.

You are a person of some interest, one comes to you

And takes strange gain away:

Trophies fished up; some curious suggestion;

Fact that leads nowhere; and a tale for two,

Pregnant with mandrakes, or with something else

That might prove useful and yet never proves,

That never fits a corner or shows use,

Or finds its hour upon the loom of days:

The tarnished, gaudy, wonderful old work;

Idols and ambergris and rare inlays,

These are your riches, your great store; and yet

For all this sea-hoard of deciduous things,

Strange woods half sodden, and new brighter stuff:

In the slow float of differing light and deep,

No! there is nothing! In the whole and all,

Nothing that’s quite your own.

Yet this is you.

MISERERES: Ahora sí, por mero oportunismo o no, se publicó la Ley de Víctimas. También, J. Sicilia y S. Aguayo han enviado una carta a Harvard en donde cuestionan la llegada de Calderón a la institución (reporteros de Televisa, por cierto, se burlaron de esto). Ya son casi 25 mil las firmas que se han reunido en contra de que se integre a Harvard. Acá está la carta: http://es.scribd.com/doc/120207963/Carta-de-Sicilia-y-Aguayo-a-Harvard. Y la violencia sigue; el pasado fin de semana fue especialmente violento en el DF y el Estado de México, hubo  al menos 22 y 13 muertos (estos descuartizados) respectivamente.

Chinches.

Encontrar a quien no se distrae con los piquetes de las chinches es más difícil que hallar un oasis en medio del creciente desierto que nos rodea.